

El día de ayer se llevó a cabo el paro de transporte promovido por la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), lo que provocó grandes dificultades en la ciudadanía, y en el caso de Avellaneda no fue la excepción. En este sentido, recurrimos a la opinión de estudiantes de diferentes barrios del municipio para saber cómo les ha afectado la medida de fuerza en sus vidas personales y labores estudiantiles.
En lo que respecta a cómo les impactó el paro, nos encontramos con Ezequiel, oriundo de Wilde, estudiante universitario: “Tanto en lo laboral como en lo educativo no tuve dificultades o me vi perjudicado por el paro, porque trabajo home office y por suerte la universidad dicto clases de manera virtual, así que en lo que es tiempo de clases no salí perdiendo”, remarcó el joven, sin embargo hizo énfasis en lo dificultoso que se hace cursar en modalidad virtual: “A mí me costó horrores estar en la clase, no estuvo casi nada, si duró una hora y media, imagínate que yo no estaba ni 30 minutos. Te distraes mucho, siento que no es efectiva la modalidad, es incómodo. Me parece más práctico que te envíen trabajos para realizar en la semana y no estar en un zoom o meet, porque no es lo mismo que una clase presencial”.
También nos encontramos con Martina, estudiante del profesorado de educación primaria y actualmente realizando las residencias como maestra: “Me impactó principalmente el hecho de no poder cursar, ya que generalmente curso pocos días de manera presencial, y estamos en tiempo de preparación de secuencias didácticas. Me hacía falta poder estar en clase, porque el feedback es mucho mejor con los profesores, lo que me sirve para estar más preparada al momento de hacer las residencias.”, comentó.
Otro caso fue el de Julian, quien vive en Villa Domínico y comentaba que sufrió muchas complicaciones tanto en lo laboral como en lo educativo; “Tuve muchas complicaciones para llegar tanto al laburo como a la facultad, más que nada porque tuve que utilizar otros medios para llegar trabajo, incluso llegue tarde, todo esto supone obvio más gastos económicos en lo normal. Pero en el caso de la universidad, las clases se dictaron virtuales o no se contaban las faltas, y no es lo mismo, aunque también entiendo y respeto el reclamo. Siempre las medidas de fuerza impactan de un modo u otro a la educación, en este caso afectó en cómo llegar a las sedes”, sostuvo.
¿Qué opinan al respecto de la medida?
Uno de los aspectos más interesantes de las notas fue la postura que tenían los jóvenes en relación a la medida de fuerza, en muchos de los casos valorando y destacando la iniciativa por una mejora salarial por parte los empleados de transporte, ante una realidad económica compleja.
Julian:” Me parece que están en su derecho de reclamar por un pago digno, y además tienen que obtener su aumento de alguna manera. Una solución viable por ejemplo sería pagar el aumento que se reclama por lo menos de forma escalonada, y que el gobierno no busque entorpecer negociaciones como estas porque no ayudan en lo más mínimo; para mí el paro está justificado”.
Ezequiel: “Me parece que es un derecho legítimo de los trabajadores reclamar por sus condiciones, pero también creo que hay que pensar en el impacto que genera en quienes dependen del transporte para estudiar o trabajar”. Además, agregó; “Considero que el reclamo es válido, aunque el modo en que se lleva a cabo siempre genera debate por las consecuencias que tiene en el día a día de la gente”.
Martina: “Creo que, como todos los trabajadores, están en una situación a nivel país en donde los sueldos están cada vez más precarizados, quedan congelados y no cubren ni siquiera lo que es una canasta básica”.” El gobierno debería darse cuenta de cómo afectan estos paros y lo esencial que es el transporte, hoy en día con mil pesos te alcanzan para apenas dos viajes”.
Sin embargo, uno de los jóvenes entrevistados remarcó que las medidas de fuerza no son algo principalmente de las medidas del gobierno actual, sino que más bien, son cuestiones de arrastre en los últimos años y gobiernos. En este punto, Martin que vive en el Centro de Avellaneda, manifestó: “Si, creo que el paro está justificado. Pero quiero blanquear que esta es una problemática que perdura desde hace varios gobiernos, no tiene relación con el de turno. El transporte público no es un gasto, es una inversión. Para los que deben ir a trabajar, estudiar y llevar a cabo sus asuntos. Y, por supuesto, para los trabajadores y choferes de los gremios, que lamentablemente, no dependen de sí mismos, sino que de medidas por parte de terceros”. “Hace bastantes años que todos los integrantes de los gremios de transporte público, sobre todo los choferes, tienen salarios muy por debajo de lo que necesitan para poder vivir en paz. Trabajan, mínimo, 12 horas para con suerte cobrar menos del mínimo. Por lo tanto, está perfecto que se expresen con medidas de fuerza”, agregó.
Los jóvenes entrevistados, pertenecientes a distintos barrios de Avellaneda dieron muestra de su postura ante la medida de fuerza, y pese a las dificultades presentadas, dejaron en claro la importancia que tiene el hecho de poder reclamar por los derechos de los trabajadores, en este caso los de transporte.