Preocupante. Desde que Racing se quedó con el Clásico de Avellaneda 1 a 0 como visitante, no volvió a ganar. Obtuvo un empate con Platense y dos caídas, ante Sarmiento y Boca. Los hinchas comienzan a sentirse inquietos por el rendimiento del equipo.

Sin embargo, el partido lo empezó mejor la Academia, que tenía más llegadas y chances claras, ante un Xeneize que no venía en buen nivel. De todas formas, a los 25 minutos, en la primera aproximación importante del local, un despeje, tras un centro, y una formidable definición de afuera del área de Lucas Blondel para poner el encuentro 1 a 0. Pero los dirigidos por Gustavo Costas iban a reaccionar. A los 33, Maximiliano Salas lanzó un buscapié que Juan Fernando Quintero pateó con arco libre y marcó el empate. El tramo final de la primera parte iba a ser del conjunto de la ribera.

El complemento iba a estar más entretenido porque ambos fueron a buscar la victoria. Al minuto de juego, gran jugada asociada de Racing, Salas lanzó un gran pase filtrado para conectar con Adrián Martínez, quien corrió, remató cruzado y logró revertir el resultado. Gran anotación de Maravilla, quien sigue siendo el goleador del equipo.

Sin embargo, la alegría duró poco. Es que, a los 4 minutos, Lautaro Blanco se movió por el sector izquierdo, quiso sacar un centro rasante, pero Nazareno Colombo puso el pie para desviar la pelota, pero, con tanta mala suerte, la metió en su propio arco para poner el 2 a 2 parcial. La Academia iba a buscar volver a ponerse en ventaja, pero Javier García, ex jugador del club, tuvo una doble intervención que le ahogó el grito de gol.

Y a los 14 minutos, lateral de Kevin Zenón, centro de Blanco y cabezazo goleador de Edinson Cavani para dar vuelta el resultado. Muy mala marca de la defensa académica. Los conducidos por Diego Martínez iban a demostrar supremacía y acorraló al rival contra su área. A los 35, Zenón sacó un centro y apareció Nicolás Valentini para cabecear y sellar el 4 a 2 definitivo. Una vez más, el equipo de Avellaneda demostró inseguridad en las pelotas aéreas.

Lo de Racing ya empieza a preocupar. No hubo envión anímico, tras el triunfo en el Clásico de Avellaneda. No hay idea de juego, todo depende de Quintero o de Maravilla Martínez. Escasez de aguantar un resultado y muy mala marca en pelotas aéreas, un punto que sufre desde hace tiempo. Por otro lado, la Academia recibió dos golazos desde lejos en dos partidos y eso también fue un duro cachetazo. El próximo rival será Defensa y Justicia, el sábado a las 19:15 en el Cilindro de Avellaneda.