Por: Santiago Montenegro

A pesar del malestar de los hinchas por el cambio de horario del partido a último momento, por temas de seguridad (internas entre barrabravas), el estadio Presidente Perón fue una fiesta en la previa, a causa de los 120 años del Club. Cuando los jugadores salieron a la cancha, fueron recibidos con un eufórico cántico, fuegos artificiales y bengalas celestes y blancas. Un escudo de la Academia fue desplegado en la tribuna que está frente a la cámara. Se acordaron de su archirrival Independiente, al que enfrentarán como visitante dentro de dos semanas, a través de un “Y ya lo veee, y ya lo veee, el que no salta, se va a la B”, en referencia al presente del Rojo. Luego, en el minuto de silencio por los caídos en la Guerra de Malvinas, la gente entonó “Y ya lo veee, ya lo veee, el que no salta, es un ingleees”.

Al principio del encuentro, no ocurría nada interesante. Racing tenía más la pelota y presionaba alto, pero no dañaba el arco rival. Por su parte, el Globo esta más replegado y buscaba el contraataque. La Academia se mostró muy desatento defensivamente, más que nada por los sectores laterales. A los 24 minutos, Juan Gauto realizó una buena jugada personal, se la dejó a Nicolás Cordero para que defina y ponga arriba a Huracán. Sin embargo, el árbitro Darío Herrera la chequeó en el VAR y lo anuló por mano de Gabriel Gudiño. A partir de ahí, el Quemero se aproximó más al arco de Gabriel Arias y tomó el control del cotejo.

En el primer minuto de la segunda mitad, Aníbal Moreno asistió a Matías Rojas para que remate desde media distancia y clave un golazo. Jugador clave en el equipo de Fernando Gago y los hinchas insisten con su renovación. El volante tiene una pegada formidable. Luego, a los 10, tiro de esquina que bajó Emiliano Insúa en el área, se la dio a Gabriel Hauche para que luche, meta el taco ante tantos defensores contrarios y marque otro lindo gol para Racing. Ahora sí, el local iba a empezar a dominar el partido. A los 25, un centro de Gauto, quien ridiculizó a la defensa académica cada vez que tuvo la pelota, Nicolás Cordero cabeceó, descontó y dejó la historia en suspenso. La Academia empezó a sufrir porque el rival persistió en su área. De todas formas, no se concretó otro tanto y se gritó victoria en Avellaneda.

Racing no mostró su mejor versión. No desplegó ese juego vistoso que demostró en los últimos encuentros ni tampoco fue muy constante en el área contraria, pero pudo ganar. Sus hinchas no se dieron como ganadores hasta que el árbitro pitó el final porque la estaban pasando mal. Otra vez apareció el salvador Rojas con su imponente zurda para romper el cero y poner en partido al equipo. Por el triunfo quedó tercero con 17 puntos, a cuatro del líder River y con la misma cantidad que San Lorenzo. Aunque ya se palpita el Clásico, primero lo primero. El próximo compromiso será ante Ñublense en Chile, por la primera fecha de la Copa Libertadores, el miércoles a las 21:00 y luego jugará con Gimnasia el sábado a las 18:00 en La Plata.