Por: Osvaldo Curci

En plena época de Mundial, todos soñamos con ser campeones del mundo. Con ver a Lionel Messi levantar el trofeo y que se repita la hazaña que sólo Diego Maradona y unos pocos deportistas pudieron lograr. Esa hazaña que en cualquier deporte es sumamente difícil. Ese sueño que todos tenemos se cumple con humildad, trabajo y mucho sacrificio y Alejandro Silva lo sabe.

El "Cuervo" Silva, como le dicen sus amigos, tiene 29 años, un récord de 19 triunfos y un empate, sin ninguna derrota, y vive en nuestra ciudad hace más de 8 años. "Un pibe de barrio, que salió de abajo. Con hambre de gloria y con ganas de sacar a su familia adelante", así se define él. Es boxeador profesional, campeón argentino y latinoamericano y sueña cada noche con obtener el cinturón que lo declare campeón mundial de boxeo.

 Avellaneda Hoy habló con él y nos contó cómo llegó a este presente, los sueños y metas que tiene y lo duro que fue el camino:

- ¿Cómo empezaste en el mundo del boxeo? ¿Cuántos años hace que dedicas tu vida a esto?

- Arranqué a los 16 años, me invitó un amigo a entrenar estando en la esquina del barrio. Como siempre me gustó hacer deportes y me había quedado libre de un club de fútbol, me dijo venite a practicar boxeo conmigo. Fui a probar y me gustó. La verdad que fue algo muy lindo. Después de eso seguí practicando, me fascinó la rutina, el ambiente, pegarle a la bolsa y saltar la soga, era todo nuevo para mi. Me llamó bastante la atención y así comenzó todo.

- ¿Venir a vivir Buenos Aires, más prescisamente la ciudad de Avellaneda, te abrió oportunidades?

- Yo soy de Posadas, Misiones. Me vine a vivir a Isidro Casanova y un tiempo después conocí a Yésica (Bopp) mi actual mujer (ex campeona mundial en la categoría minimosca de la Asociación Mundial de Boxeo) con quien ahora vivo en Avellaneda. Hace ocho años que estoy en esta ciudad y cuando llegué quedé maravillado. Con el tiempo fue creciendo más y más en todos los aspectos. Es un barrio muy hermoso, tiene un rango de deportistas muy alto. Te podes encontrar con todas las comodidades para entrenar. Cualquier deportista tiene todo a su alcance para poder lograr su sueño y sus objetivos. Hay pista de atletismo, un centro de alto rendimiento, hermosos parques y clubes muy bonitos.

Y ni hablar de que tenemos una campeona del mundo como Yesi que es una campeona con todas las letras, pionera de todos los campeones, para mi un orgullo, no solamente convivir con ella, sino también tenerla como pareja. Es una persona que a mi me inspira un montón y me enseñó mucho.

- ¿Qué significado tiene para vos hoy el boxeo? ¿Qué te dejó estos años de carrera?

- Algo que a mi me quedó muy marcado por este deporte es la disciplina, es muy difícil de sostener en el tiempo porque todos tenemos baches. La disciplina es la máxima enseñanza que me dejó. El respeto, el respeto hacia el entrenador, hacia el compañero y creo que también la humildad. Todo va de la mano. Si reunís todo eso la gente te va a querer, te va a apreciar y vas a tener más público, más apoyo. Esas fueron las 3 cosas que me dejó muy marcado. Hay otras como la perseverancia y la constancia, también muy importantes en el boxeo.

- ¿Tuviste "baches" en tu carrera? ¿Pensaste en colgar los guantes alguna vez?

- Nunca se me pasó por la cabeza dejar de boxear, ni de entrenar. Este deporte para mi siempre fue mi cable a tierra, yo creo que cada vez que me sentía mal, estaba enojado o hacía cosas que no estaban bien, el boxeo me marcó el camino. Este deporte para mí lo es todo, porque mi sueño era ser jugador de fútbol,  no se dio y todo lo que me está pasando ahora es cumplirlo desde este lugar, las vueltas de la vida son así.  Estoy super agradecido, muy contento, cada vez que voy a entrenar lo hago con el corazón, con mucho amor porque se que me dio todo esto. Hoy en la actualidad estoy en los EEUU, en la ciudad de Los Ángeles y nunca pensé que iba a llegar hasta este momento. El boxeo me dio todo. Sé que cuánto más le entregue a este deporte, más me va a devolver.

Nunca se me pasó por la cabeza dejar. Te cuento algo: una vez me fui a hacer unos estudios y  me había saltado que tenía un soplo , una arritmia en el corazón y me habían dicho que me tenía que alejar del boxeo. Me decían que me podía agarrar un paro cardíaco arriba del ring, eso fue algo que me asustó y me alejó dos meses de todo. Sin embargo, me convencí a mi mismo de que estaba bien, de que no tenía nada en el corazón, sino ya me hubiese muerto. Cambié de médicos, me seguí haciendo estudios y una vez me hice hacer una resonancia magnética donde me salió que tenía el corazón agrandado y que era por la misma exigencia del deporte. Imaginate que ni así se me cruzó por la cabeza dejar de entrenar. Así que hoy estoy acá, luchando por mi sueño. Ser CAMPEÓN DEL MUNDO.

- ¿Qué sentís cada vez que te subís al ring y recordás todo lo que pasaste para llegar a ese momento? 

- Se siente una adrenalina que no puedo explicar, muchos nervios. Son un montón de cosas que se te cruzan por la cabeza, que sólo las vas superando a través de la experiencia y de los entrenamientos. Yo creo en la tranquilidad interior, uno entrena para eso. Aunque también, si no sentís nervios es que no estás sintiendo totalmente al deporte o a lo que te dediques porque creo que el nerviosismo es parte de eso, de lo que estás haciendo. Lo veo muy clave en esos momentos, en la vida o en lo que estudies, creo que siempre el nerviosismo está y hay que convivir con él. Otro sentimiento es la adrenalina, lo que te genera es algo muy lindo porque vos sabés que te puede salir bien si te preparás y estás al 100%.

- ¿Cuál es tu mayor sueño? ¿Cómo te imaginas la vida el día después de conseguirlo?

- Lo que todo deportista siempre aspira es convertirse en CAMPEÓN DEL MUNDO. Mi sueño es lograrlo y después cuando lo cumpla seguir agregando otros. Porque he tenido la experiencia de charlar con varias personas que tenían un sueño solo y al cumplirlo después se sentían vacías. Yo no quiero que me pase. Por eso hoy sueño con eso y cuando lo logre me voy a proponer más y más cosas. Mi idea es reinar en mi categoría, ser el mejor, llegar a lo más alto posible en el boxeo, llevar la bandera de mi país por el mundo y tratar de inspirar a otros a que también lo puedan lograr.

Me pongo metas y lucho por ellas. Así que si mi sueño es ser campeón mundial voy por ello. Mi objetivo es a los 30 años lograrlo, hoy tengo 29 y siento que cada pelea que voy realizando me deja cada vez más cerca de cumplirlo.

- ¿Cómo te preparás en la actualidad? ¿En qué momento de tu vida te encontrás?

- Actualmente estoy haciendo una preparación en Los Ángeles, Estados Unidos. Estoy haciendo mi carrera acá, con proyección de venirme a vivir. Es un proyecto familiar, que siempre me he planteado ya que, sinceramente, siento que tengo que estar acá en la "cuna" de lo que es el boxeo y tratar de exprimir los años que me quedan de carrera acá. Otro punto importante es poder generar la mayor parte del dinero para poder, el día de mañana, comprarle una casa a mi mamá, otro de los sueños que tengo. 

Yo apuesto a la luna, en el peor de los casos le voy a pegar a las estrellas. Mis metas siempre van a ser grandes, mis sueños aún más. El trabajo y el sacrificio está, solamente hay que seguir trabajando y el universo está obligado a darte lo que te merecés. Voy por todo, voy por mi sueño, por el futuro de mi hija, de mi familia y por llevar la bandera de Argentina a lo más alto del mundo.