La estación Avellaneda del Tren Roca es, tal vez, la más precaria, incivil, oscura y sucia del recorrido. Todo en ella remite a desidia y olvido. Una maqueta que anticipa al elefante blanco que bajo el nombre de Estrella del Sur se erige frente a ella como símbolo de una Argentina incapaz de hacer las cosas en tiempo y forma y en donde lo provisorio se torna permanente.

Tras la paralización de las obras en 2017, el Ministerio de Transporte de la Nación volvió a adjudicar los trabajos para construcción de una estación de verdad que comenzaría a tomar forma en las próximas semanas de la mano del único oferente: la unión temporal de empresas (UTE) entre ATF Construcciones-Construcciones OMI.

La licitación previa era de 2016 pero nunca comenzó los trabajos pues el contrato fue rescindido por incumplimientos.

LA NUEVA ESTACIÓN AVELLANEDA DEL TREN ROCA

La estación Avellaneda marca la primera gran bifurcación del Tren Roca entre las formaciones eléctricas que vía Quilmes concluyen en La Plata y los que irán por Temperley hacia Alejandro Korn y Ezeiza.

Bautizada Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, la estación recuerda a los dos piqueteros asesinados en 2002 por la Policía Bonaerense. A metros, la vieja calle Bosch, lleva ahora el nombre de Mariano Ferreyra, militante trotskysta asesinado por la patota sindical de la Unión Ferroviaria. Paradojas de la política local de matadores que homenajean a sus víctimas.

Precisamente sobre Mariano Ferreyra se rehabilitará el segundo acceso a la estación lindero al andén 4, que hoy está cerrado y donde se instalará una nueva boletería y se colocarán molinetes.

Se remodelará el vestíbulo principal de la estación y el túnel bajo los andenes con nuevos solados, cielorrasos, paredes y aberturas, además de luces.

También se elevarán las plataformas 1 y 2 y se restaurarán los refugios en los cuatro andenes.

Además se instalarán nuevas luminarias LED, renovarán las salas operativas, se colocarán nuevos sistemas contra incendios, equipamiento para audio y seguridad, y, finalmente, se instalarán tres ascensores para acceder los andenes que son elevados.

QUÉ PASARÁ CON LAS EXPRESIONES ARTÍSTICAS SOBRE KOSTEKI Y SANTILLÁN

El nombre alude a un “hecho sociopolítico sensible”, según indicaron desde Trenes Argentinos por lo que se tendrá cuidado para no afectar durante la obra las expresiones artísticas del túnel y el vestíbulo que hacen referencia a aquel asesinato.

También renovarán las veredas en mal estado en la fachada de la estación y en las calles Mariano Ferreyra y Obreros de La Negra donde transformarán el espacio verde en un parque lineal.

Por otra parte, readecuarán rampas y sendas peatonales en los cruces, además de instalar nuevos refugios y paradas de taxis y colectivos sobre la avenida Hipólito Yrigoyen.

En tanto, está proyectado generar una nueva plaza seca de acceso a la estación desde Hipólito Yrigoyen, reaprovechando un sector en desuso ubicado en el lateral del edificio principal de la vieja estación de Avellaneda.