

Por: Santiago Montenegro
El sur de Estados Unidos estaba todo copado por argentinos que esperaban ansiosamente ver a Messi y al equipo Albiceleste. El Hard Rock Stadium estaba repleto, no entraba un alfiler. Algo que llamó la atención (a nosotros, más que nada) es que las hinchadas estaban mezcladas. Argentinos y hondureños compartían las tribunas, sin ningún inconveniente. A pesar de eso, nuestra gente no se abstuvo de cantar y silbar a los contrarios.
La fiesta estuvo, tanto afuera como adentro de la cancha. Es que Argentina dominó todo el partido y Gerónimo Rulli tuvo una actuación prácticamente nula. Muy pocos tiros al arco de parte de Honduras. Por su parte, el equipo de Lionel Scaloni jugó muy relajado, a puro toques y aproximaciones al arco rival. A los 15 minutos, Messi sacó un conejo de su galera y le metió un pase fenomenal a Alejandro Gómez, quien asistió de primera a Lautaro Martínez para que la empuje y ponga el primero del encuentro.
A los 45 minutos, Giovani Lo Celso fue derribado y el árbitro sancionó penal para la Albiceleste y a los 46, Messi lo cambió por gol definiendo cruzado y abajo, al otro palo que se tiró el arquero Luis López. En el complemento, la supremacía argentina perduró. Y a los 23, tras un brillante robo en el campo de Honduras, Messi tomó la pelota y, de primera, se la picó a López para clavar un golazo y sellar el triunfo argentino.
La Selección argentina volvió a dar una clase de fútbol ante un rival bastante inferior que no clasificó al Mundial de Qatar. Sin embargo, esto sirve para mayor confianza y motivación. El último compromiso previo a la Copa del Mundo será ante Jamaica el martes a las 21:00 (hora de Argentina), en el Red Bull Stadium de New Jersey, Estados Unidos.