En los últimos minutos del viernes pasado, los vecinos de Temperley y Banfield fueron testigos de un nuevo hecho de inseguridad que acabó con un feroz intercambio de disparos y más de 50 detonaciones.

Cerca de las 23.30, al menos cinco delincuentes fuertemente armados que habían robado una pick-up Volkswagen Amarok blanca comenzaron su huida mientras que la Policía fue puesta en alerta y se inició así una persecución.

En la esquina de Belgrano y Gascón, el móvil policial -de similares características al de los ladrones- dio alcance a la camioneta y se produjo el tiroteo. Un vecino de la cuadra logró asomarse por una ventana y grabar durante casi dos minutos lo que fue una verdadera lluvia de balas, muchas de las cuales impactaron en el móvil de la Policía.

El sonido permite apreciar la violencia de este operativo que -milagrosamente- no dejó víctimas ni del personal policial ni de eventuales terceros que pasaran por el lugar.

Finalmente, los delincuentes lograron darse a la fuga en otro vehículo, abandonando la pick-up que no sería el único vehículo que habrían robado en su raid de anoche. En el lugar descartaron dos armas, una pistola Bersa Thunder .380 Plus y un subfusil Halcón ML-63, un arma antigua calibre 9mm que fue usada por el ejército (incluso en la Guerra de Malvinas) y por la Policía hasta los años '90.

Los peritos trabajaron durante la madrugada sobre los vehículos, donde quedaron reflejados los orificios de bala, mientras que el asfalto quedó regado de vainas servidas.